Saltar al contenido

MARCAR LA DIFERENCIA

Por: Schneur Zalman Ben-Chaim

La vida poco a poco se nos ha venido enredando por escuchar más hacia afuera que hacia adentro, convirtiendo a la gran mayoría de la sociedad en un grupo de personas influenciables, que aceptan lo que las redes, pastores, caudillos o similares les digan que deben creer, las razones por las cuales deben indignarse y las diferencias por las que se debe mirar a otros con desprecio e incluso con un poquito de odio.

Se nos enreda la vida por tragar entero, por no cuestionarnos, por no atrevernos a pensar, ya que es mucho más cómodo empeñar nuestro juicio y dejar que otros decidan, piensen, y lo direccionen. Esto, que aplica a todos los niveles de la vida, termina por cortar cualquier posibilidad de progreso individual y obviamente social, ya que quienes viven sin cuestionar nada, aceptan todo y dan por hecho todo, matan su curiosidad, una de las fuentes principales de la creatividad e innovación, impulso del desarrollo, progreso y crecimiento.

Escuchamos más hacia afuera que hacia adentro, y dentro de nosotros hay una pregunta que merece ser explorada: ¿Acaso no podría estar mejor?

¿Eres todo lo feliz que puedes y mereces ser?¿Lo que haces actualmente es el aprovechamiento del 100% de tus capacidades, talentos y cualidades?¿Podrías ser un poquito mejor como persona para quienes te rodean?¿Vives lo suficientemente tranquilo?¿Realmente lo estas dando todo de ti?…

Somos seres ambiciosos, y eso bien manejado es fantástico, porque nos reta a tratar de estar cada vez mejor, nos ayuda a entender que debemos superar lo que creemos que somos para lograr todo lo que podríamos llegar a ser, nos impulsa y nos mueve hacia donde antes no creeríamos lograr llegar. Pero habitualmente nos quedamos pensando es en lo que no nos gusta o lo que nos falta, en vez de tratar de trabajar por todo lo que podríamos lograr.

Puede que haya muchas cosas que no nos gusten, y es normal; muchas otras que quisiéramos que fuesen diferentes, pero no van a cambiar si nos quedamos en la crítica o no hacemos realmente algo por cambiar, si nos quedamos simplemente recibiendo como ciertas las opiniones de los demás en vez de construir la nuestra; si no nos arriesgamos a hacer esperando a que todo nos llegue por arte de magia.

Es nuestra obligación demostrar que todo puede ser mejor, que podemos romper rutinas, patrones e influencias que nos enredan la vida siendo la mejor versión de nosotros mismos, marcando la diferencia con nuestro comportamiento en vez de con nuestras críticas. Sin esperar nada a cambio, sólo por el placer de ser diferentes e impulsados por el deseo de ser mejores día tras día.

Podemos ser todo lo que deseamos ser, si nos atrevemos a actuar, a ser, a cuestionar, a pensar, a no tragar entero y por el contrario tratamos de analizar, construir nuestro propio criterio, y por supuesto tomar conciencia para ser el cambio y con pequeños actos, marcar la diferencia..

Y es ahí en donde esta la clave, en disfrutar ser diferentes, en entrevernos a no hacer, decir y pensar como todos los demás, porque en el mundo ya hay demasiadas personas trabajando por dividirnos y ser amplificadores de odios, diferencias, prejuicios y mala energía. Por eso, en un mundo lleno de odio, tu simplemente se amor. ¡Hazle el amor a la vida!

Zalman Ben-Chaim

@Zalman5k

Un comentario sobre “MARCAR LA DIFERENCIA Deja un comentario

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

A %d blogueros les gusta esto: