VIVIR EN EL FUTURO
Hoy en día tenemos acceso a herramientas, oportunidades e información que hace una década o dos no habríamos logrado tener y muchas de ellas ni siquiera imaginar. Cuando vemos series de ciencia ficción de los 90’ parece que fuesen prehistoria, definitivamente todo ha cambiado tanto que es difícil acordarse de como era la vida antes de muchísimas cosas que hoy son cotidianas.
Vivimos en el futuro, en un futuro que cambia constantemente y tan rápido que se integra casi de inmediato a nuestra cotidianidad y con ello sentimos que siempre fue parte de nuestra vida, quitándonos la oportunidad de extrañar las cosas antes de esos cambios, básicamente porque nos cuesta recordarlas. Y no es para nada exagerado, simplemente trata de pensar como era tu vida antes de que tuvieras un Smartphone, lo cual si tienes más de 30 años será un recuerdo difuso, y si estas en tus 20, bueno, no lo puedes recordar porque siempre lo tuviste.
Sea cual sea el dispositivo tecnológico de tu preferencia, sin hoy vivimos conectados al futuro, lo cual por un lado genera una fuerte dependencia pero a su vez, también nos ha permitido acceder a avances importantes en muchas áreas y a agilizar de alguna manera nuestra vida en diferentes aspectos. Lo paradójico es que se supone que estos avances nos ayudan a ganar tiempo, pero el tiempo que ganamos lo estamos desperdiciando precisamente por estar conectados a ese futuro que vivimos en vez de conectarnos con nuestra propia vida.
Cuando faltan dos meses para terminar el año, la gente en general se concentra tanto precisamente en las celebraciones de diciembre que parece que Noviembre no existiera, y cuando llega diciembre normalmente todo son planes, propósitos y euforia por los meses que vendrán, a tal punto que el primer mes del año la mayoría de personas no avanzan mucho; para cuando eso termina se empieza a planear la mitad del año, y casi de inmediato lo que pasará en el último trimestre para cerrar… y así, de plan en plan, muchas personas ven pasar sus años, desconectados de la vida misma y tan concentrados en lo que vendrá que se les olvida vivir lo que hoy tienen frente a sus ojos.
Lo mismo pasa cuando esperamos con demasiada ansiedad el fin de semana, desde el lunes o martes estamos tan concentrados en nuestro deseo por ver llegar el viernes, que lo que pasa en los días intermedios parecería suceder sin pena ni gloria, y cuando llega ese anhelado fin de semana, parece terminar en un abrir y cerrar de ojos, porque inconscientemente estamos más concentrados en despedirnos de el y desear que vuelva, que en aprovecharlo mientras sucede.
Tiene grandes ventajas vivir en el futuro, conectándonos de una mejor manera con la información que puede hacer mejor nuestra vida, ampliando nuestro conocimiento y ganando tiempo, pero la mayor ventaja la vamos a encontrar cuando podamos usar esto para conectarnos de una mejor manera con nuestra vida, para que podamos vivir aquí y ahora, y disfrutarlo a plenitud, en vez de simplemente verla vida pasar.
7 comentarios sobre “VIVIR EN EL FUTURO” Deja un comentario ›